



Pase la noche con una amiga, no les miento, por mi mente pasaban muchísimas cosas. El rose de sus pies con los míos me excita a mucho, ella es hermosa, de repente acariciaba mi espalda con sus uñas y les juro que más de una vez me contuve para voltear.
Pero tranquilos, no es mi momento de despertar mi lado lesbiano, quizá algún día y obvio, les contaré.
Mientras, les dejo estas fotos que ella me tomó, porque además es una gran fotógrafa!