


En primavera la playa era una delicia El sol aún no había tostado mi cuerpo Visitar el deseo por las dunas entre la arena y la sal. Una piel que busca a otra piel Unas manos que necesitan de tus brazos para fundirnos en un abrazo y estallar la pasion, en el juego más antiguo de este mundo, que sin querer te devuelve, el juego del placer...